Así como el árbol
se
fertiliza
con
sus hojas secas
que
caen y crecen
con
sus propios medios,
el
hombre
se
engrandece
con
todas sus
esperanzas
destruidas
y
con todos
sus
cariños desechos.
Hay algunos valores que en su máxima expresión definen el gran hombre que era nuestro padre,
BONDAD
no hay ni una persona que le conoció que no lo recuerde como un hombre extremadamente bueno
RESIGNACIÓN
siempre sufriendo en silencio, siempre con humildad
RESPETO
por todos, conocidos o no, se lo merecieran o no,
AMOR
esa gran capacidad de darnos amor a raudales sin esperar nada a cambio,
su inmensa GENEROSIDAD
esa generosidad del alma, esa generosidad de vida
y su GRATITUD
a pesar de los duros reveses que le dió la vida.
Sin dar lecciones magistrales, desde su silencio, desde su ejemplo, nos dejó el legado de grandes lecciones de vida.
Fue un gran hombre, un gran marido y sobre todo un gran padre.
Te
queremos papá.